‘Jerez Intramuros’ o cómo EV aterriza en los cuadernos de bitácoraNota bene: el blog ‘Jerez Intramuros’ –que acaba de recibir las salvíficas aguas del bautismo en la pila nunca marmórea de Internet- hubiese sido muy del agrado de Hipólito Sancho de Sopranis. O, si me apuran la semicorchea de la soberanía local, de Manuel Barbadillo. Eduardo Velo se ha metido de hoz y coz –y nunca a contrapelo del sentido común- en el terrestre y a veces silvestre adobe de los cuadernos de bitácoras (esa arcilla que moldeamos a nuestra imagen y semejanza y a mayor loa y honor de la Madre Comunicación). ¿Sincronía y sintonía junguiana? ‘Jerez Intramuros’ avizora una inmolación de nostalgias y un retablo de remembranzas de nuestra Muy Noble y Muy Leal Ciudad. Podríamos también titularlo como aquella colección gráfica editada a mediados de los ochenta por Forges: ‘Historia de aquí’. Pasen con retina curiosona y lean sin aspavientos esta simbiosis de reflexión personal aliñada con el aceite de oliva del rigor histórico. A alabanza y prez de doña Blanca de Borbón, de Alfonso X el Sabio, de Manolo el del almacén de la calle Bizcocheros, de don José Rodríguez ‘el cura de San Pedro’ o del veraneo de sillas de playa en las casapuertas de la memoria.
Post scriptum: puede usted visitarlo en la siguiente dirección (que ya añado a mi lista de blogs recomendados): http://jerezintramuros.blogspot.com/
