La Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y
Letras, en sesión pública solemne, clausuró el pasado jueves el Curso Académico
2015-2016 con la concesión del título y nombramiento oficial –tras aprobación
unánime de la Junta de Gobierno de esta docta institución cultural jerezana y
su posterior refrendo de la Asamblea General del cuerpo de académicos de
Número- de Secretario General de Honor a favor de quien durante más de
veinticinco ininterrumpidos años desempeñara intachablemente esta labor: Andrés
Luis Cañadas Machado. El acto, amén su prescriptivo rigor formal –propio del
protocolo y las formas idiosincrásicas de la Real Academia-, estuvo también
marcado por una honda empatía corporativa, por un rotundo reconocimiento
institucional y por las entrañables manifestaciones de todos los oradores
participantes.
La señaladísima ocasión contó con la siempre estimable
asistencia del presidente del Instituto de Reales Academias de Andalucía,
Benito Valdés Castrillón, quien afirmó que suponía para su persona “todo un
honor y una alegría asistir a una sesión de semejantes características, donde
además se rinde homenaje no sólo –tan merecidamente- a la persona de Andrés
Luis Cañadas, sino igualmente a la figura, esencial y capital, del Secretario
General de la Academia, de nuestras Academias”. Para Benito, “si bien los
presidentes y vicepresidentes, o directores o subdirectores, de las Reales
Academias las representan de un modo público e institucional, ciertamente son
los Secretarios Generales quienes engrasan el engranaje interno de la
corporación para que todo funcione correctamente”.
El presidente del Instituto de Reales Academias de
Andalucía quiso además “felicitar muy particularmente a Andrés, porque es el
primer Secretario de Honor que, como tal, existe en nuestras Reales Academias
de Andalucía. Conozco y he conocido el cargo –tan meritorio como práctico- del
Secretario General Perpetuo, es decir, del académico que ha ejercido dicha
misión hasta el día de su muerte, pero en pleno ejercicio de las responsabilidades.
Mañana mismo, desde el Instituto, cursaremos una nota a todas las Reales
Academias que agrupamos al efecto de extender esta gozosa noticia para todos
nosotros”.
La sesión académica contó con sendas intervenciones
troncales del presidente de Honor de la misma, Francisco Fernández
García-Figueras, y del presidente titular Joaquín Ortiz Tardío, quienes
glosaron la figura y la trayectoria de Andrés Luis Cañadas tanto desde el punto
de vista académico –“Andrés ha cedido a la Academia el bien más preciado de una
persona: su tiempo”- y curricular también desde la óptica profesional y
promotor y hacedor de iniciativas culturales y sociales. Tanto en ambas
intervenciones como en la propia de Andrés Luis a modo de sincero
agradecimiento, salieron a relucir, como una dulce abrazadera a los memoriales
de la intrahistoria de la propia Academia, nombres y apellidos de
destacadísimos académicos –de feliz y fecundo recuerdo- que a no dudarlo
marcaron época y vivencias y tenaces dedicaciones.
Andrés Luis Cañadas jamás aminoró ni acortó su constante
pulso vital en pro de las labores y las gestiones propias de un cargo tan
crucial como el de la Secretaría General de una Real Academia, en este concreto
caso de la Academia Jerezana. Bien son conocidos sus esfuerzos y sobresfuerzos
personales además en el compromiso inalterable de no faltar nunca a ninguna
convocatoria de sesión pública de cada martes cuando incluso su destino laboral
sentaba despacho en la ciudad de Sevilla. Exhaustivo en la tramitación oficial
de documentos y en la puntual redacción de toda la gestión propia de las
relaciones internas y externas que la Secretaría General conlleva, Andrés Luis
Cañadas ha sido –y sigue siendo- uno de los artífices de la actual renovación
de nuevas incorporaciones de savia nueva del cuerpo social de académicos.
La Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y
Letras cierra así un brillante curso académico en el que de nuevo –con 35
sesiones públicas desarrolladas- se alza como una de las Reales Academias más
activas y pródigas en número de actos y convocatorias de cuantas forman y
conforman el Instituto de Academias de Andalucía.