Flamenco, 'El juego del ahorcado' y 'Hombres a la carta'

La ocasión la pintan calva y a las oportunidades siempre debemos cogerlas por los pelos. Es el caso que nos ocupa en la actualidad, es decir, el flamenco. Porque el Festival de Jerez ya resuena como ecos adelantados de un homenaje que cada año encuentra en Villamarta su mejor expresión. Acudan al recaudo de la ciudad estos próximos días: el canto y el cante brotará de las peñas, encima del escenario, al costadillo de las esquinas de la memoria. El flamenco es un género siempre recomendable. Porque –aunque no lo advirtamos- anida siempre dentro de nosotros. En cuanto al cine, qué queréis que os diga. La cartelera de las salas jerezanas nos la prometen muy felices. Llevamos unas semanas de buena cosecha. Yo les recomendaría dos películas españolas –porque el cine español también existe a las afueras de los dominios de Penélope Cruz, los Bardem y compañía-. No se pierdan, por ejemplo, El juego del ahorcado, una interesante apología del amor juvenil como análisis de una rebeldía fuera de órbita. Igualmente Dieta mediterránea. Este metraje demuestra que la saga de los Molina –con la pequeña Olivia a la cabeza- aún dará mucha tabarra en el mundo de la escena. Apunten, por último, un libro de veras interesante. Hombres a la carta, de Javier Sádaba y José Luis Vázquez. Los avances vertiginosos de la biología y la genética han suscitado reacciones de temor y esperanza. Todo lo que toca el secreto de la vida provoca miedo o rechazo. Este libro –de afán divulgador y voluntad de síntesis- pretende animar el debate sobre los límites de la investigación científica, analizar los dilemas que se abren para la ética e introducir una necesaria y urgente reflexión política. Una obra, en fin, para hablar con conocimiento de causa.

PROGRAMACIÓN CULTURAL

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