Antonio Romero: “Mientras la mafia viaja en Ferrari, la Administración lo hace en patinete”

“Mientras la mafia viaja en Ferrari, la Administración lo hace en patinete”, así de contundente se expresó ayer viernes el conocido político Antonio Romero durante su intervención en la librería Hojas de Bohemia. Venía acompañado del periodista Miguel Díaz para presentar conjuntamente un libro que, escrito por ambos, resulta imprescindible a día de hoy para conocer la realidad de la Costa del Sol: ‘Costa Nostra: Las mafias en la Costa del Sol’. Como cabía esperar, la convocatoria levantó oleadas de expectación –no en balde sendos autores desglosarían el contenido de dicho trabajo de ardua investigación sin pelos en la lengua-, de modo que el patio interior de la librería Hojas de Bohemia registró un lleno absoluto.

La convocatoria partía de la coorganización del Partido Comunista de España, la editorial Atrapasueños y la librería Hojas de Bohemia –además de la colaboración de la Escuela de Hostelería de Jerez-. Los dos autores de ‘Costa Nostra: Las mafias en la Costa del Sol’ llegaban a Jerez avalados por su trayectoria profesional y, singularmente, por la acentuación del conocimiento de causa del tema que, con valentía y a pecho descubierto, abordarían. El periodista Miguel Díaz Becerra fue miembro de la Comisión Gestora que gobernó el Ayuntamiento de Marbella tras la disolución decretada por el Consejo de Ministros a consecuencia del estallido de la Operación Malaya. Además ha desplegado su labor profesional en diversos medios de comunicación de Marbella y la Costa del Sol.

Por su lado, Antonio Romero es archiconocido a todos los niveles dada su condición de histórico líder del Sindicato de Comisiones Obreras, así como del Partido Comunista de Andalucía y de Izquierda Unida. Ha ocupado diversos puestos institucionales, entre los que destaca su labor como diputado en el Congreso, en el Parlamento de Andalucía y su candidatura a la alcaldía de Málaga.

Miguel Díaz indica que en el libro “describimos, respaldándonos con claras evidencias, que la mafia no es un hecho lejano o cinematográfico. Muy al contrario, se presenta como una realidad que se desenvuelve ante nuestros ojos, participa en la misma esfera económica, política y social que el resto de la ciudadanía e interactúa como un elemento perturbador, eleva el precio de la vivienda con su intensidad especulativa, golpea la Hacienda Pública con el blanqueo de capitales, traiciona el interés general al corromper las instituciones políticas y los planteamientos urbanísticos, incrementan la seguridad con la violencia de sus ajustes de cuentas o robos violentos, dañan la salud pública con el tráfico de estupefacientes, vulneran los derechos humanos con el tráfico de personas, etcétera”.

“De su cercanía –añade Miguel Díaz- da buena prueba la constatación de que el 80% de las mociones de censura que se han producido en los ayuntamientos españoles en los últimos cinco años responden a cuestiones urbanísticas, o que en sólo dos años se hayan efectuado tres macro operaciones judiciales como Ballena Blanca, Malaya e Hidalgo, relacionadas con el blanqueo de capitales, la especulación urbanística y la corrupción municipal y en las que vemos implicados a políticos, empresarios de la construcción, banqueros, notarios, abogados y hasta personajes del espectáculo y la farándula, lo cual demuestra la cercanía, la cotidianeidad y el grado de arraigo de la actividad mafiosa en nuestra sociedad”.

Díaz denuncia que la mafia ha generado “graves escándalos que han ido labrándose delante de la mirada de la sociedad, a plena luz del día, sin que los gobiernos de turno se esforzarán en atajarlos, merced a la indolencia y la complicidad, al menos por omisión, del gobierno andaluz, el estatal y los organismos internacionales que, a pesar de contar con las competencias y la obligación de atajar las prácticas delictivas promovidas por estos entramados organizados, durante años han preferido en la mayoría de los casos mirar para otro lado y, desde su pasividad, fomentar en la práctica la expansión de la criminalidad y la corrupción, a la vez que participaban de los réditos del Negocio”.

Para Antonio Romero, “se trata de una certeza que corroboran con contundencia los datos oficiales ofrecidos por el Ministerio del Interior al revelar que 133 grupos dedicados al Crimen Organizado han sido desarticulados en los últimos tres años en la Costa del Sol, lo que arroja un balance de 1.233 detenidos. Nos topamos igualmente con la distorsión que generan los paraísos fiscales, con el paradigma de Gibraltar en primer término, en la lucha contra el Crimen Organizado; la infradotación de medios de la judicatura y los cuerpos de seguridad estatales o una regulación urbanística basada en la liberalización del suelo que espolea el crecimiento salvaje, la especulación y el urbanismo mafioso que emponzoña tantos ayuntamientos”.

Jesús Gil fue mentado constantemente durante la presentación de ‘Costa Nostra: Las mafias en la Costa del Sol’. Según Antonio Romero, “en 1991 el showman y empresario Jesús Gil accedió a la alcaldía de Marbella con una aplastante mayoría absoluta, marcando el inicio del fenómeno político más pernicioso para la Costa del Sol desde la dictadura franquista (…) En un rápido despliegue de su milimétricamente calculado plan de asalto a Marbella, forjó su propia estructura de ingeniería financiera, como atestiguan diversos informes del Tribunal de Cuentas, merced a un entramado de sociedades paralelas al Ayuntamiento, sumidas en la mayor opacidad, con las que escapaba del control democrático. Desde ellas emprendió el saqueo del Ayuntamiento y su corrupta gestión municipal, vaciando de paso a las administraciones locales que controlaba de cualquier atisbo de democracia y contabilidad pública. Se dedicó a desarrollar un urbanismo salvaje al margen de la legalidad, sin respetar las normativas de planteamiento vigentes, ni los principios más elementales de la planificación urbana, y se supeditó el lucro personal a los intereses generales de la ciudadanía que deben presidir cualquier actuación desde una administración democrática”.

El libro ‘Costa Nostra: Las mafias en la Costa del Sol’ no sólo denuncia y destapa la acción de las mafias sino que asimismo ofrece una serie de propuestas para combatir el Crimen Organizado. Líneas de acción como la elaboración de un programa de lucha común que dote a la UE, la ONU así como a otras instituciones internacionales, de mecanismos concretos y funcionales que aborden directamente los aspectos más determinantes en la actividad y expansión de las mafias, salvando la descoordinación y déficit actuales, la armonización de los modelos de recogida de información policial de forma supranacional, el establecimiento de unos servicios de inteligencia especializados en el Crimen Organizado y coordinados a nivel supranacional, atajar la expansión de redes criminales a otros ámbitos delictivos distintos a sus circuitos tradicionales, el consenso de una nueva ley de colaboración con la justicia de miembros del Crimen Organizado arrepentidos y un programa de protección de testigos adecuado al modus operandi de estos grupos, el compromiso necesario de renunciar a determinadas parcelas de la soberanía nacional de los Estados o la confiscación de los bienes, el patrimonio y los entramados empresariales de estas organizaciones parecen propuestas de obligado cumplimiento para la lucha contra las mafias organizadas. Al término del acto Antonio Romero y Miguel Díaz firmaron un buen número de libros adquiridos in situ por las personas asistentes al acto.

PROGRAMACIÓN CULTURAL

PROGRAMACIÓN CULTURAL