Maribel
Ortega, Ángel Hortas y Enrique Orellana fueron sucesivamente ovacionados en una
sesión de alta magnificencia musical
La Real Academia de San
Dionisio de Ciencias, Artes y Letras ha revalidado un año más la excelencia de
su tradicionalísimo concierto de Navidad. Una convocatoria de veras esperada,
plagada además de matices, que en esta ocasión no sólo despertó el favor del
público en repetidas ovaciones sino que además levantó a la concurrencia de sus
asientos para así aclamar la magnificencia musical protagonizada por la soprano
Maribel Ortega, y por los académicos de esta real corporación jerezana Ángel
Hortas –órgano- y Enrique Orellana –violín-. Parafraseando al poeta, puede decirse
que el público “quedó transfigurado por la blanca purificación del
espectáculo”. La perfección técnica y la renombrada profesionalidad de los
protagonistas –un cartel completísimo que hizo las delicias del respetable-
cuajaron una sesión memorable cuyas resultantes acentuó un aura de sublimidad
artística en el salón de actos de la Real Academia de San Dionisio.
El programa ofreció piezas muy
escogidas ex profeso de autores tan significativos como Mozart, Mascagni,
Händel, Bach, Massenet, Hubay o Adam, entre otros. El acto, que estuvo dedicado
a la memoria del queridísimo Académico, recientemente fallecido, Adrián Fatou,
contó, a modo de prólogo, con un recitado de versos exaltadores de la Navidad a
cargo del también académico José Marín –quien eligió poemas de Luis Rosales,
Vicenta Guerra, Antonio Murciano o Ángel García López-. Al término de la sesión, el presidente de la
Academia, Joaquín Ortiz Tardío, pronunció unas sentidas palabras de
felicitación institucional de cara a las inminentes fiestas navideñas.